La micropigmentación de labios consiste en micro incisiones en las que se implantan pigmentos a nivel epidérmico y se realiza con unas pequeñas agujas. Es un proceso muy parecido al microblading de cejas, aunque requiere mayor delicadeza debido a la sensibilidad de la zona.

En la primera sesión se hace el diseño enfocado a la morfología del rostro de cada persona.

Si el labio tiene mancha o son morados se debe realizar un trabajo de neutralización para luego aplicar color al labio.

Si es un labio rosado se trabaja color desde la primera sesión.

Al mes es necesario realizar un retoque, así se garantiza que el trabajo tenga una durabilidad de 1 a 3 años aproximadamente.